"Gracias a Dios nunca veo o leo nada, le rezo a Dios, en el camerino pienso en cosas positivas, en los que me apoyan y eso me alimenta, para salir a la cancha a dar lo mejor de mí. Si fuera por la gente hace tres años me hubiera retirado, pero confío en mis capacidades", aseguró el guardameta "tricolor".
Junto a esto el cancerbero destacó que no tiene problema con el juicio de la afición y de la prensa, ya que él se dedica a trabajar aislándose tanto de las redes sociales como de los medios de comunicación.
"Son golpes, en esta ocasión recibí cinco goles, pero nos queda una enseñanza. Que sigan escribiendo, no los voy a leer, mis redes las maneja otra persona, que se dediquen de hablar, estoy concentrado en lo mío y en lo que puedo dar, soy consciente que uno puede cometer errores y que en el segundo gol pude hacer un poco más", dijo el portero de la nacional.
De esta manera la "Sele" recibió un golpe de realidad en Málaga, duelo en el cual también se sintió la ausencia de sus máximas figuras.