“Nuestros tres mejores lanzadores de penales fallaron sus disparos hoy. Lo siento por Kasper (Schmeichel) y por todo el equipo”, declaró en conferencia de prensa.
Christian Eriksen, Nicolai Jorgensen y Lasse Schoene fallaron sus lanzamientos desde los once metros, haciendo inútiles las dos atajadas de Schmeichel, quien en el minuto 116 ya había parado un penal a la estrella croata Luka Modric que pudo dar el pase a los balcánicos.
“Esta es la crueldad del fútbol. Croacia es el mejor equipo de Europa al contragolpe. Tener el control era importante y creo que lo conseguimos en el segundo tiempo”, concluyó.