Un atraso de poco más de media hora desató una serie de comentarios y reclamos por parte del Club Sport Cartaginés y uno de ellos fue el tema de la iluminación del estadio, mismo que molestó a los protagonistas “brumosos”, principalmente a su entrenador Martín Arriola.
En la conferencia de prensa después del partido 0-0 de visita en el Estadio “Cuty” Monge ante el Municipal Pérez Zeledón, el Director Técnico aseguró que la iluminación de este recinto deportivo influyó en el desempeño de sus jugadores en el juego correspondiente a la Fecha 13 del Torneo Clausura 2019.
“¿Ustedes pueden creer que estas luces estén habilitadas?”, fue la consulta hizo el estratega ante los medios de comunicación presentes en la cancha de Desamparados, donde además expresó que es muy complicado que se mejore si las situaciones se siguen manejando de esta manera.
Además de Arriola, uno de los líderes de Cartaginés también comentó que en el segundo tiempo ya era un poco complicado ver con claridad en este recinto deportivo. Se trata de Néstor Monge, quien además de resaltar su problema personal de visión, también dijo que sí le costaba observar el partido incluso desde el banquillo.
“Yo uso lentes y desde la banca no veía nada, estaba complicado. Cuando me dijeron que la iluminación estaba avalado por la Unafut me sorprendió porque a mí me costaba ver, yo tengo un problema de astigmatismo, pero me costaba bastante ver de afuera”, comentó Monge.
Asimismo, el futbolista agregó que la iluminación era la misma para ambas escuadras y que no hay excusas por empatar a cero goles; sin embargo, estos detalles le impiden al fútbol nacional evolucionar, según relató Néstor Monge tras concluir el compromiso frente a los “Guerreros del Sur”.
“No hay excusas, era para los dos equipos igual, obviamente son detalles que no dejan crecer el fútbol de Costa Rica que esté pactado para una hora y que se juegue a otra, pero esos son detalles que a nosotros no nos corresponde”, aseveró el jugador.
Estos no fueron los únicos reclamos de los representantes de la “Vieja Metrópoli”, ya que antes de iniciar el juego la Directiva envió una solicitud de los tres puntos ante Pérez Zeledón, ya que los 35 minutos de demora varió la preparación para este compromiso.
Según la redacción de la apelación “brumosa”, la media hora de tardanza los afectó en:
- Altera las horas de sueño por periodo de espera.
- Horas de descanso.
- Alimentación e hidratación de nuestros jugadores.
- Planificación médica para la recuperación de los jugadores.
- Rendimiento deportivo y mental de los jugadores por la espera.
- Generación de ansiedad por parte de los jugadores.
- Riesgo de lesión por lo anteriormente mencionado.
A pesar de esto, Néstor Monge como representante de sus demás compañeros, aseguró que este tema se aleja de lo deportivo y que él prefiere que sea una decisión de la administración; sin embargo, aceptó que en el fútbol como en cualquier otro deporte se vale disputar puntos sobre la mesa.
“Nosotros nos dedicamos nada más a jugar, ya lo otro es meramente administrativo. Aquí hay que jugar con todo, muchas veces se han perdido puntos en la mesa y se han ganado también, pero eso no me compete a mí porque a mí me gusta ganarlos en la cancha y punto, pero hay situaciones donde uno se tiene que agarrar de todo para su bienestar”, finalizó Néstor Monge.
Los “brumosos” se acuerpan en lo que expone la reglamentación del Fútbol de Primera División y esperarán que la Unafut se refiera el tema y decida si el punto que se llevó cada equipo se mantiene o si los tres puntos se les sumará los cartagineses.