Dos minutos después de la una de la tarde, los dos equipos saltaron al césped del Estadio Da Luz en Lisboa para buscar el pase a la siguiente fase de la Uefa Champions League (UCL), certamen que dejó una primera etapa (entre estos dos clubes) dominada prácticamente por el equipo comandado por Gian Piero Gasperini y un segundo tiempo de ensueño para el costarricense Keylor Navas y compañía, esto a pesar de una lesión que afectó al guardameta nacional.
Primer tiempo: Atalanta vs. PSG
El capitán del Atalanta, Alejandro el ‘’Papu’’ Gómez puso a prueba al arquero Keylor Navas quien en esta y dos jugadas más, reaccionó a la perfección, lució sus reflejos y evitó que los de Italia vencieran su arco. Sus reflejos bajo el marco le dieron confianza a su club, sin embargo, la puntería no estuvo a favor de los franceses durante esta etapa y prácticamente todo el partido.
La primera acción en ofensiva para el PSG llegó muy temprano, no transcurrían ni cinco minutos cuando Neymar Jr. tuvo en sus piernas la oportunidad de abrir el marcador. El brasileño se fue al frente en compañía de dos de sus contrarios e intentó bañar al arquero Marco Sportiello, pero el atacante no atinó la dirección de la pelota y el registro seguía 0-0.
Esta acción se repitió durante toda la primera etapa porque el artillero suramerinano no tuvo una, sino varias opciones al frente para adelantar a su club, pero la fortuna no estuvo de su lado y los parisinos no pudieron festejar cortesía de Neymar, que en el segundo tiempo fue mejor acompañado en el ataque. Por su parte, Keylor Navas hacía lo propio en sus redes para impedir que sus contrarios acabaran con sus cordeles.
El nacional demostró su liderazgo, potencia y reflejos ante los ojos del mundo futbolero al negar una, dos, tres y hasta cuatro veces que los italianos lo presionaron con jugadas de táctica fija, disparos directos, cabezazos y cuanto acercamiento pusiera en riesgo su puerta, no obstante, el costarricense no pudo reaccionar de la misma manera a los 27’.
La presión del Atalanta dio réditos cuando el croata Mario Pašalić sacó ventaja a la desatención de los de París para poner el 1-0. El centrocampista aprovechó que el colombiano Duván Zapata dejó pasar la pelota para él pegarle directo a la esquina superior derecha, un remate imposible para el portero costarricense.
La paridad era la nueva meta del París Saint-Germain y una vez más apareció Neymar con acciones en complicidad con Mauro Icardi, sin embargo, los desvíos se robaron el protagonismo y la primera etapa fue vencida por los italianos que para el segundo tiempo hicieron sus ajustes con la intención de dejarse el boleto a la siguiente ronda, pero los de Francia nunca bajaron los brazos y demostraron que en el fútbol nada está escrito hasta que el referee suene su silbato por última vez.
Segundo tiempo: Atalanta vs. PSG
No había más chance para el conjunto parisino que estos 45’ o más. Al igual que Gian Piero Gasperini, el Director Técnico Thomas Tuchel también ajustó sus líneas en búsqueda del empate y una de estas variantes fue el ingreso de Kylián Mbappé que sustituyó a Pablo Sarabia, esta variante con la que el técnico alemán demostró que quería y necesitaba goles para seguir soñando con levantar la copa o al menos avanzar a la siguiente fase después de 25 años ausentes en la instancia de semifinales.
Al minuto 73' los parisinos estuvieron cerca de igualar el resultado, pero el arquero contrario actuó a la perfección y repelió la jugada que lo puso en aprietos. Previo a esta jugada por la banda izquierda, el juego se detuvo por un periodo de dos minutos debido a una complicación con el tablero del cuarto árbitro y también por una lesión de Keylor Navas. El portero tico se rindió sobre el césped, sus compañeros lo asistieron, Sergio Rico se alistó para ingresar, pero Navas se levantó y continuó en la cancha jugando su competencia favorita en Europa.
Aún así, su presencia en la cancha duró por aproximadamente siete minutos más, esto porque a los 79’ se hizo efectiva la variante de Rico por Navas que se adoleció en una de sus rodillas y desde el banquillo, estuvo cerca de festejar el 1-1 gracias a Mbappé que remató directo a portería, pero un desvío negó el empate.
La tensión era cada vez más grande con esta y otras jugadas en ofensiva que no se concretaban y que incitaba a muchos a dar por clasificados a los italianos, sin embargo, los de Francia demostraron que en este deporte y sobre todo, en la Uefa Champions League cualquier cosa puede pasar y que además, la esperanza es lo último que muere.
De la tempestad a la gloria parisina
A los 90’ apareció el suramericano Marquinhos para reavivar el ánimo de su club, en el apílogo del juego llegó el gol que Tuchel y todo PSG necesitaban. El balón viajó de izquierda a derecha y en este sector fue Neymar quien bajó la pelota para cederla a Marquinhos que en el centro del área ajustó sus tacos para rematar y acabar con el arco de los negriazules.
Esta anotación impulsó el ánimo del París Saint-Germain que con el 1-1 alargaban el compromiso a tiempos extra, sin embargo, el sufrimiento de 90’ fue suficiente y en ltiempo de reposición, el PSG trabajó en la reposición para darle vuelta al registro y clasificarse sorpresivamente a las semifinales.
El encargado de poner el 1-2 definitivo fue el delantero Choupo-Moting (ingresó de variante). El futbolista se combinó con Kylian Mbappé para que a los 90+3’ brotaran lágrimas, abrazos, gritos y cualquier muestra de alegría porque los de París consiguieron la voltereta que buscaron desde los 27’ cuando llegó la anotación de los italianos. Por otro lado, nació la angustia y la desesperación porque a veces, el fútbol también es injusto.
De esta manera, Keylor Navas y compañía continúan con vida en este certamen internacional, se convierten en el primer equipo clasificado a la siguiente fase de la UEFA Champions League.