Recogió su medalla, se llevó la mano al corazón y miró a la grada buscando consuelo. Una pancarta aparecía en el anfiteatro de Saint-Denis invocando a la religión Kloppiana: “Jurgener believers”, rezaba.
La fe red, sin embargo, no alcanzó en París. El entrenador del Liverpool advirtió en la previa de que cuanto más se gana, más cerca se está la derrota, en referencia a la infalibilidad del Madrid en su Copa de Europa. Pero no fue esta vez. El alemán se acogió a una especie de ley de probabilidades no demostrada y erró.
No importó que el Madrid necesitase nueve paradas de Thibaut Courtois, que Mohamed Salah lo intentara nueve veces y que Alisson Becker no hiciera ninguna intervención. 24 remates totales del Liverpool y cuatro del Madrid. Pero ganó el Madrid. Cuando el técnico tuvo que dar explicaciones, solo hubo incredulidad. “Ellos han marcado un gol y nosotros, no. La explicación más fácil en el mundo del fútbol”, resumió.
“El portero fue el mejor”, dijo Klopp. “Courtois hizo tres paradas increíbles. Necesitamos más calidad en el último tercio. Creo que el Madrid hizo un tiro a portería y terminó en gol. Lo que se hace dentro de las reglas está bien”, añadió el entrenador, que felicitó a sus jugadores.
“Les he dicho a mis chicos que me siento orgulloso. Ellos necesitan tiempo para asimilarlo, pero han hecho una temporada impresionante. Se nos han escapado dos títulos por detalles, por un punto y la final de la Champions por un gol”, apuntó.
En una semana se les fueron los dos trofeos de más relumbrón. Después de una campaña extenuante, disputando el máximo de encuentros posibles, la cosecha se redujo a la Copa de la Liga y la FA Cup, levantadas ambas en la agonía de los penaltis.
En toda la temporada, antes de esta final, el Liverpool solo se había quedado sin marcar en tres partidos: 0-1 contra el Inter en la vuelta de octavos de Champions, pero sin consecuencias tras el 0-2 en Milán; 0-0 en la ida de las semifinales de la Copa de la Liga ante el Arsenal, luego enmendado por el 0-2 de la vuelta; y el 1-0 frente al Leicester en la Premier el Día de los Santos Inocentes.
Por: AP