Ambos llegaron como líderes de sus grupos, de ahí que el “clásico del buen fútbol” tuvo un ingrediente adicional, pues todos queríamos ver en qué nivel llegaban a este duelo.
Ninguno de los dos desentonó, aunque el partido se divide en dos partes.
El arranque estuvo teñido de morado. Saprissa se mostró mejor, más dinámico y con un Marino Torres encendido.
Esteban Alvarado tuvo que volar apenas al minuto 7 tras un paradón de Kendall Waston. Avisaba el Saprissa que venía con hambre.
La receta se repitió en un saque de esquina. Mariano cobró de forma perfecta, se precipitó Alvarado en su salida y el espigado Waston abrió el marcador de cabeza al minuto 29.
Saprissa tentó el arco con otras dos ocasiones, que pudieron haber cambiado el partido sin duda alguna.
Incluso, un gran remate de Luis Paradela al 56’ dejó vibrando el horizontal y despertó la emoción de la gradería morada.
Pero Medford es un perro viejo en el campeonato y desde el banquillo supo leer el juego, además de que cuenta con una infinidad de opciones en su banquillo.
El juego comenzó a cambiar de manos con el ingreso de Kennedy Rocha y más tarde de Giovanni Arturo Campos.
El brasileño trajo peligro y despertó la verdadera ofensiva de los líderes del campeonato.
Kevin Chamarro (ya dueño del arco morado) volvió a figurar, incluso ahogando el gol al propio Rocha en un par de ocasiones.
Eso sí, no pudo hacer nada cuando Arturo Campos lo fusiló a un costado dentro del área para sellar el empate 1-1 al 74’.
Tras el gol, y una torpe expulsión de Waston por meter la mano a una pelota en una jugada de ataque, el Herediano tomó mayor fuerza y cerró mejor, sin embargo, el tiempo se acabó antes de que llegara el segundo para los visitantes.
El empate 1-1 es un buen negocio para ambos equipos que prácticamente firman un pacto de no hacerse daño.
El Team sigue líder del grupo A esta vez con 30 puntos, nueve más que Alajuelense.
Saprissa llega a 24 unidades en la cima del grupo B y mantiene una ventaja de cuatro puntos con el Puntarenas FC.
A falta de cuatro fechas, ambos luchan por el liderato general que les permitiría cerrar todas las series en casa y estar sembrados a una gran final nacional de ser necesario.