Hay que ser claros: este equipo es el mejor Saprissa de la última década. Es una mezcla entre solidez defensiva, una estilo bien definido de juego y buena pegada. Se puede decir que lo tiene todo.
El Team no fue rival para el Monstruo. Entró tambaleando a semis y la S le sacó a relucir todas las dudas de la temporada.
Saprissa comenzó con ímpetu. Iniciando el juego, David Guzmán estrelló un tiro libre en el poste.
La velocidad de Warren Madrigal le permitió marcar el primer gol a los 18 minutos y por lo que se veía en el partido quedó claro que hasta ahí llegaba la serie. Ya estaba definida aunque faltara mucho por jugar.
Al 38’ fue el turno de Orlando Sinclair… claro, Sinclair no podía faltar de anotarle a su víctima favorita: Herediano.
Ambas anotaciones llegaron gracias a acciones colectivas y velocidad en el último cuarto de cancha. Madrigal y Sinclair cerraron con remates en el centro del área.
Para el segundo tiempo, el técnico Vladimir Quesada se dio el lujo de cuidar a algunas figuras para la final ante la Liga.
Del Herediano, muy poco. Quizás lo más entretenido fue ver a Jafet Soto en el banquillo con todo el picante que eso significa. Si no que lo diga el árbitro Pedro Navarro, quien llegó a conversar varias veces con él.
Saprissa quiere el bicampeonato. Eso está claro. La gran pregunta es si los manudos podrán arrebatárselo.
