El Dépor salió al partido con el objetivo de buscar la salvación y con la incógnita de cuál sería el nivel de intensidad que metería el Barça, ya campeón, al último partido de la temporada.
Esas incógnitas se despejaron en el minuto 4 con una rápida contra del Barcelona, que condujo por banda izquierda Vermaelen para acabar centrando. El despeje de Fabricio cayó a los pies de Pedro, que devolvió al segundo palo donde Messi, de cabeza, puso por delante a los locales. Jarro de agua fría para un Dépor que apenas le había tomado la medida al partido.
En el minuto 16 la tuvo de nuevo el Barça en una doble ocasión en la que Fabricio volvió a demostrar el nivel excelso de toda la temporada al despejar un buen lanzamiento de Messi y cortar a bocajarro el lanzamiento de Pedro. Un perfecto resumen de las actuaciones del guardameta canario durante todo el año.
El Deportivo esperaba bien colocado atrás las acometidas de los locales y trataba de sacar el balón jugado, lo que le permitió llegar en tres ocasiones al área blaugrana, por banda derecha, pero los centros de Salomâo no encontraron rematador o acabaron en las manos de Masip.
A los 35 minutos Canella sufrió un encontronazo tras el que tuvo que ser retirado en camilla con un fuerte golpe que obligó al asturiano a abandonar el partido y a Víctor a introducir a Medunjanin en el terreno de juego.
El Barça, con parsimonia, pero con la mordiente que le dan sus jugadores de arriba, siguió generando ocasiones de peligro como un disparo de Xavi ligeramente desviado.
La tuvo Cavaleiro a punto de llegar al descanso tras una jugada personal de Lucas por banda derecha que, tras ganar línea de fondo, acabó centrando para que el portugués metiese la puntera y el balón se marchase desviado.
Con el 1-0 en el marcador y la victoria del Eibar (3-0) y los empates de Granada (0-0) y Almería (2-2) la jornada final se fue al descanso. El Dépor estaba a un gol de la salvación.
En la reanudación el partido continuó con la misma dinámica, el Barça tocando con tranquilidad para buscar área blaquiazul y el Dépor esperando su oportunidad a la contra.
Se adelantó bien Fabricio con el pie a una llegada de Adriano cuando el segundo tiempo transitaba por sus primeros minutos. El Dépor también responde con una llegada por banda derecha que Salomâo acaba poniendo en la cabeza de Juan Domínguez, que no logra orientar el remate a portería.
El Barça tuvo una buena ocasión por mediación de Xavi con una falta que el catalán lanzó fuera, pero no perdonó instantes después con una rápida jugada en la que Messi acabó rematando a puerta vacía tras la asistencia de Neymar. El partido y la permanencia se le esfumaban al Dépor con media hora todavía por delante.
Borges, con un lanzamiento desviado a dejada de cabeza de Medunjanin, lo siguió intentando para el Dépor. Las esperanzas regresaron en el minuto 21 con un golazo de Lucas a la media vuelta con un cuarto de partido todavía por jugar. El sí se puede se escuchó en el Nou Camp de las gargantas de los 300 seguidores que ocupaban la parte más alta del estadio.
Medunjanin estrelló un lanzamiento directo de falta en el larguero, lo que aumentó la convicción del Dépor en ir a por el empate y la salvación.
Fabricio se la robó de los pies a Neymar para justo después evitar la vaselina de Xavi que buscaba anotar en su despedida del Barça en Liga. En la respuesta, una polémica mano en la frontal provocó una falta para el Dépor que Medunjanin estrelló en el pie de un jugador de la barrera. Se quedó con el rechace, intentó disparar pero al final fue Salomâo el que la enganchó para poner el 2-2 en el marcador y llevar el delirio a todo el deportivismo.
El Dépor supo contener en los últimos minutos, eternos, incluidos los cinco de descuento, pero al final consiguió el empate necesario para quedarse en el sitio que le corresponde: Primera División.