Tanto Óscar Esteban Granados como el azteca, Luis Omar Hernández, bromearon ante el presentimiento de Brown, quien les comentó que anotaría el tanto con que los florense alzarían el título.
“Cuando veo que el balón entra, sin duda me pasan muchas cosas por la cabeza; es lo mejor que he vivido como jugador, fue demasiado emotivo. Decidí celebrarlo con la gente, precisamente porque cuando Granados me estaba bromeando, yo le dije que si anotaba lo iba a festejar con la afición y así fue”, rememoró Brown.
El limonense agregó que llegó al Herediano para ser campeón, una meta que alcanzó en su segunda temporada vestido de rojiamarillo, pese a que el conjunto de la “Ciudad de las Flores” registró altibajos a lo largo del torneo.
“Cuando firmé con Herediano era el número 32 en el camerino. Siempre me tuve fe en el trabajo y gracias a Dios se me dio la oportunidad de llegar acá y el torneo pasado jugué 10 partidos. Hoy siento que tengo un premio, fuimos al Azteca y nos metieron seis, en Alajuela nos llevamos cuatro. Tuvimos la serenidad para levantarnos”, finalizó.