El Catania donde milita Érick Cabalceta iniciará la temporada con una sanción de 12 puntos, y además el club deberá pagar una multa de 150.000 euros.
Su presidente, Antonino Pulvirenti, que admitió en junio haber comprado cinco partidos para evitar el descenso, recibió una multa de 300.000 euros y una suspensión de cinco años.
El director deportivo del club siciliano, Pablo Cosentino, por su parte, tendrá que pagar 50.000 euros y cumplir una suspensión de cuatro años.
El 23 de junio, la policía arrestó a siete personas, entre ellas a Pulvirenti y Cosentino, acusados de haber arreglado cinco encuentros durante la temporada 2014-2015: Catania-Livorno, Catania-Avellino, Catania-Trapani, Catani-Latina y están relacionados con otro encuentro investigado, el Mesina-Ischia.
Descendido a la Serie B al término de la temporada 2013-2014, el Catania había terminado este último curso en la mitad de la tabla clasificatoria.
En otro asunto distinto, otros dos clubes de la Serie B, el Savona y el Teramo, fueron descendidos a la 4ª división, por amañar el encuentro de final de temporada que les permitió subir a mabos clubes de la LegaPro a la Serie B.