Andreas Cornelius (71') fue el encargado de marcar el único tanto del partido, en una acción más que confusa, que alcanzó a definir el atacante para dejar sin reacción a la visita. Giancarlo González fue estelar y tuvo un buen juego, esto hasta que vio la tarjeta roja al 80' por acumulación de amarillas.
De esta manera el Bologna se rezaga en su lucha por los principales puestos en Italia, pero se mantiene en el octavo lugar.