El Drochtersen/Assel, capitaneado por un vendedor de coches, recibió al gigante bávaro en su pequeña ciudad de 11.500 personas, al noroeste de Hamburgo.

“Fue un partido increíble para nosotros. No es una derrota, nunca pensamos que solo íbamos a perder por 1-0. Este resultado es un gran cumplido para el equipo”, señaló el técnico del Drochtersen Lars Uder.

“Fue un partido duro, esto es lo que puede ocurrir en la Copa”, señaló el nuevo técnico del Bayern Múnich, Niko Kovac.

Kovac no había querido dar pie a la sorpresa y alineó un equipo con 11 internacionales, entre ellos el francés Franck Ribery, el holandés Arjen Robben, Thomas Muller y Lewandowski.

“No fue lo que esperábamos, jugamos muy lento, pero al final logramos lo que buscábamos”, añadió Kovac, que en la segunda parte dio entrada al medio Leon Goretzka, fichado del Schalke, y al extremo francés Kingsley Coman.

Antes del gol visitante, la mejor oportunidad bávara fue un disparo al travesaño del internacional español Thiago Alcántara (56).

El partido, que fue interrumpido cinco minutos después de que cayeran al campo rollos de papel y balones de playa, lo definió Lewandowski al desviar un tiro de Goretzka.

La gran sorpresa del día fue la derrota del Eintracht Fráncfort, ganador de la pasada edición (3-1 ante el Bayern), que perdió por 2-1 ante el Ulm, de cuarta categoría.

En los otros duelos, el Hoffenheim se paseó en Kaiserslautern (tercera división) y venció 6-1 con  un triplete del brasleño Joelinton.

El Werder Bremen tampoco se dejó sorprender por un equipo de cuarta categoría, Wormatia Worms, al que derrotó también por 6-1.

Por: AFP