La sanción fue anunciada el 22 de febrero. La FIFA prohibió fichar al club de Roman Abramovich por no respetar las reglas en materia de traspasos de jugadores menores.
Los Blues, que recibieron además una multa de 600.000 francos suizos, algo menos de 530.000 euros, están acusados de haberse saltado la reglamentación en traspasos internacionales en las operaciones concernientes a 29 jugadores menores.
El 5 de marzo el Chelsea anunció que recurriría esta sanción, sorprendiéndose de que la apelación no suspendiera temporalmente la sanción, como sí ocurrió en casos precedentes con otros clubes.
La comisión de recursos de la FIFA estudiará la apelación el jueves y ofrecerá una decisión dentro de algunas semanas. El objetivo, según una fuente próxima a la institución, es ofrecer una respuesta “antes de la apertura del mercado de verano” para, en caso de decisión desfavorable, dejar abierta la posibilidad al Chelsea de acudir al Tribunal Arbitral del Deporte (TAS).
El Barcelona, el Atlético de Madrid y el Real Madrid fueron ya sancionados por infracciones similares en años anteriores, pero sus recursos permitieron retrasar el cumplimiento de la sanción. El Barça y el Atlético vieron luego confirmado su castigo, mientras que en el caso del Real Madrid se redujo a una única ventana.
El Chelsea estima que se le está tratando de manera diferente “en relación a otros clubes europeos” y espera recibir las razones por escrito de esta decisión antes de decidir si emprende otra acción en la justicia, anunció el club a principios de marzo.
Por: AFP