"Fútbol. Estaba en un lugar al que le tengo un cariño terrible y me tengo que ir. Pero me voy con cariño, también. El de los compañeros, del nuevo cuerpo técnico, del personal del club... Y claro, de la gente. Mucha gente que me ha parado para despedirme. Yo creo que eso es bonito y que es lo que tiene que quedar. Puedo decir que he sido honesto y lo he entregado todo. Me voy tranquilo.
Para qué vamos a ahondar en eso. De qué me sirve. He logrado asumir lo que ha sucedido. Claro que me sorprendió, pero se acabó y así es la vida. Las dos partes sabemos cómo fue el proceso y el rencor solo trae cosas malas. Encontramos la solución a la que se pudo llegar. No voy a salir de aquí disparando a nadie, he sido feliz y agradezco lo vivido. Soy así", aseguró el volante costarricense.
Junto a esto el contención que ahora se vestirá de "Manudo" señaló que regresa a Costa Rica porque es su tierra y aprovechará este pasaje para estar más cerca de su familia, amigos y seres queridos.
"Es mi país, porque el fútbol de allá viene en crecimiento, y porque han ido pasando los años y he estado lejos de los míos y noto que el tiempo no lo voy a recuperar. Parte de la vida también consiste en pasarla con quienes lo merecen, con quienes han estado siempre ahí. Vuelvo a casa.
Lo importante es lograr dormir sabiendo que has hecho las cosas como debías y que la gente se va a posicionar y eso no puede afectarte. El fútbol admite opiniones de lo más diverso y eso lo hace más bonito.
Cómo voy a descartar eso, hombre. No sé en qué etapa será, pero la idea siempre estará ahí", dijo el mediocampista "Rojinegro".
Ahora Borges espera integrarse lo más rápido posible a la disciplina liguista y comenzar a sumar minutos con su nuevo equipo pensando en la fecha eliminatoria de octubre con la selección.