"En el primer tiempo fuimos eficientes, aunque queríamos más eficacia porque se generaron cuatro opciones de gol y logramos la mitad. La lucha la ganamos en el medio campo, marcamos diferencia, encontramos buenos espacios y se filtró bien la pelota. Cuando terminó el partido en Heredia dijimos que para maximizar el punto había que ganar en casa y lo logramos. Más allá de los tres puntos ante Limón viene el aspecto de confianza que hemos construido, porque los jugadores creen en lo que pueden dar y en los compañeros que tienen al lado, cada uno lucha por el compañero y esto resultó en un exitoso rendimiento deportivo", dijo el estratega santista.
Junto a esto el timonel guapileño destacó que aprendieron de los sucedido en el Invierno 2016, en donde no tuvieron gran suceso en la misma instancia, por lo cual saben que su buen momento no es para volverse "locos" y deberán trabajar sin descanso alguno.
"Por situaciones de aprendizaje que vivimos hace seis meses. En el torneo anterior nos metimos entre los mejores del país y no estuvimos a la altura, así que aceptamos las críticas porque tenían razón. El equipo muestra crecimiento, entendió que tenía que jugar diferente, que estos partidos son distintos a los de la fase regular y hay aplicación en el campo. El lunes entrenamos temprano y lo de hoy queda olvidado para concentrarnos en Saprissa", dijo el técnico "rojiblanco".
Ahora Santos tendrá una gran chance de darle una estocada al Monstruo en el Ebal Rodríguez, reducto en el cual cayeron ante los morados 1 a 2 en la etapa regular.