"Sí, claro, es mi mejor día. Estar al frente de la Selección es una responsabilidad muy grande, pesada y se le cumplió al país, con la ayuda de todo el mundo. Las decisiones pasan por mí en lo deportivo y esto es quitarse un peso de encima. Ahora falta cumplir en el Mundial, repetir lo de Brasil 2014 y hasta mejorarlo", aseguró el timonel tico.
Junto a esto el "Machillo" aceptó que no se imaginaba tan pronto en esa posición, ya que el llegó a la tricolor para ser ayudante de campo y después el destino le dio la responsabilidad de ser el entrenador de la "Sele".
"Venía aquí de asistente, se da lo que se dio y me tocó asumir, algo tan rápido, tomar decisiones fue difícil, rápido y tener la dicha porque en ningún momento pensé en eso, sino que fui paso a paso y este sábado se culmina con la clasificación", dijo Ramírez.
Ahora estratega costarricense deberá librar una compleja visita a Panamá para cerrar la eliminatoria y después sí poder pensar en la próxima copa del mundo.