"Icardi se ha sometido a una resonancia magnética en el Instituto Clínico Humanitario de Rozzano debido a los síntomas dolorosos antes de la rodilla derecha. Las evaluaciones no mostraron variaciones significativas en comparación con los exámenes realizados antes del inicio de la temporada deportiva actual", informó el club.

El Inter de Milán citó a Icardi en el hospital para determinar a qué se deben los dolores en su rodilla y en su tobillo, ya que el delantero apenas ha podido realizar trabajos de fisioterapia.

En este sentido, desde el club sospechan de la actitud del argentino, enfrentado tras retirarle la capitanía antes del duelo de Europa League frente al Rapid de Viena.

El jugador, acompañado de su esposa y su padre, acudió al hospital, donde se le realizaron diversas pruebas médicas, entre ellas una resonancia magnética que no apreció ninguna variación significativa.

Entretanto, Wanda Nara, mujer y representante del futbolista, advirtió al Inter que Icardi no volvería a competir hasta que le devolviesen el brazalete de capitán. Una situación que ha tensado aun más la relación en plena negociación de renovación.